BOP nació del deseo compartido de crear un espacio donde la comunidad, el arte y el bienestar se encuentren de forma orgánica y auténtica.

Laura y Rebecca combinan la visión creativa y estratégica con la sensibilidad hacia el movimiento, el cuidado y la conexión entre personas. En cada encuentro se unen pilates, sound baths, brunchs, música y talleres creativos en un mismo espacio, donde la verdadera magia está en que surjan conexiones auténticas: vengas solx o acompañadx, siempre sales con el corazón más lleno.

Su visión es clara: “Siempre hay sitio para unx más”, un lema que refleja la esencia de BOP como un proyecto abierto, inclusivo y vibrante.

Un día, en los inicios de BOP, se cruzó en nuestro camino Isabelle, fotógrafa, artista y ahora amiga.

Con su carisma y su energía nos cautivó al instante, porque reflejaba a la perfección lo que somos: un proyecto que busca crear conexiones auténticas.

Su trayectoria la ha llevado a trabajar en muchos rincones del mundo, siempre con una mirada sensible y una narrativa visual cuidada, capaz de capturar la esencia de cada momento y transformarla en memoria compartida.

Primero amiga, ahora compañera de este bonito proyecto.

Lluna, diseñadora gráfica, es la mente y el corazón detrás de toda la identidad visual de BOP. Su mirada creativa, su sensibilidad y su forma de entender el diseño han hecho que el proyecto respire lo que somos: frescura, conexión y cuidado.

Gracias a ella, cada cartel, color y detalle reflejan la esencia de nuestra comunidad — arte, bienestar y presencia compartida.

BOP también se construye así: con personas que crean desde el alma y transforman las ideas en experiencias visuales llenas de vida.